Verdades no gratas
Todos traemos arrastrando un pasado. Muchas veces ese pasado viene arrastrando pasados de familiares nuestros. Es por eso que dicen que "somos la copia de tal o cual persona".
La cuestión es que muchos arrastramos eso y no nos damos cuenta de que hay que cambiar. Uno no decide cómo es que llega a este mundo y bajo qué circunstancias, pero sí decide, cómo se va.
He visto infinidad de personas que se acercan a mi a pedir consejo o a querer externar sus sentimientos, generalmente vienen a hacerse las víctimas de lo que sucede en sus vidas, pero cuando les hago ver que ellos tienen toda la responsabilidad de lo que sucede, se molestan porque dicen que "no los comprendo". Fue así que tomé la decisión de no escuchar a nadie que venga con mentalidad de víctima. Si vienen con mentalidad de querer cambiar su situación, y están dispuestos a hacerse responsables de ella yo estoy dispuesta a enseñarles, si solo quieren hacerse la víctima en mi NO encontrarán un oído que les escuche.
La vida que llevé no fue fácil. Para llegar a donde estoy tuve que pasar por muchas situaciones muy difíciles, y lo único a lo que llegué fue a cambiar. A medida que aprendía, cambiaba mi vida. ¿Por qué? Porque para poder salir de una situación que no es agradable, hay que hacer un cambio para lograr los resultados que se quieren. Es este proceso lo que cuesta demasiado. Es aquí donde la mayoría tira la toalla. Es aquí donde se gesta la realidad de las cosas que no tenemos pero que deseamos. Es en el cambio donde nos encontramos.
Muchos han dicho que soy muy fría. Sienten lástima por alguien y automáticamente para mí es "Está así porque quiere". Y empiezan a decir una letanía de que no es porque quieren sino por las circunstancias.
Si, las circunstancias pueden ser muchas, pero ¿por qué ha habido personas que salen de eso y cambian para bien y otras que se hunden más en ello?
La realidad es por cómo reaccionan a eso. No es fácil ni sencillo pero aquellos que han salido es porque HAN QUERIDO, porque estuvieron dispuestos a pagar el precio que requería el cambiar. Los demás lo quieren fácil, por eso no salen. Porque esperan a que otros les solucionen sus problemas y andan yendo de persona en persona tratando de encontrar a quien dan más lástima para que les acceda a sus súplicas. Pero ¿qué pasa después? Nada. Se quedan igual a como estaban en un principio. Porque no aprendieron. Solo les solucionaron el problema por un momento pero no aprendieron. Y al no aprender, no hay evolución del ser y no hay cambio interior, ni exterior. Por eso los problemas sociales.
Porque la gente prefiere echar culpas a encontrar al culpable en sí mismo. Porque se nos ha enseñado que nosotros no estamos mal, que es nuestro alrededor lo que está mal. Porque se nos ha enseñado a echarle culpas a todos sin responsabilizarnos de nuestra realidad.
Cuando nos responsabilizamos, hay cambio. Porque nos damos cuenta de que hay algo que no es correcto y buscamos mejorarlo, pero no buscamos afuera sino en nosotros mismos. Pero la mayoría de la gente hace lo contrario. Será el momento cuando nos enseñen sobre esto, que los problemas sociales, emocionales y sentimentales se acabarán, pero como las verdades nunca son gratas, tardará mucho tiempo en ser aceptado.
